Por la fe…Rahab







Hebreos 11:31

Por la fe Rahab la ramera no pereció juntamente con los desobedientes,  habiendo recibido a los espías en paz.

          Me encanta ver el nombre de Rahab en dos lugares muy especiales de la Biblia: aquí, en la galería de los héroes de la fe de Hebreos 11 y en Mateo 1 cuando se hace el recuento de la genealogía de Cristo. Es maravilloso ver cómo Dios no tiene en cuenta quién era, qué hacía o cuál era su pasado…lo que a Dios le importa es el arrepentimiento y el deseo genuino de un corazón dispuesto a conocerle. Rahab es no sólo una maravillosa historia de fe, de una fe que no mira el costo de sus acciones, sino un ejemplo de la gracia divina y de la misericordia de nuestro Dios.

          Josué capítulo 2 nos da el recuento de quién era esta mujer y de cómo su vida se entreteje con la del pueblo de Israel, que ya está entrando en la tierra prometida. Josué decide enviar unos espías a Jericó para que hagan averiguaciones. Estos espías llegaron a la casa de Rahab, a quien la Biblia describe, de forma poco halagüeña,  como una “ramera”. Probablemente era una prostituta del templo, lo cual era algo aceptable para los Cananeos. Rahab y su familia vivían dentro del muro exterior de Jericó. Eso no era sólo un muro, había casas construidas por toda la fortificación para hacerla inexpugnable.

          ¿Por qué los espías fueron allá si Rahab era una prostituta? Personalmente creo que fueron porque su casa era un lugar en el que podían esconderse sin llamar la atención. Y, sobre todas las cosas, porque ese fue el lugar al que Dios los guió. Quizás no era el hogar al que ellos hubieran ido, pero sí era el lugar al que Dios los estaba llevando.  De entre toda la ciudad de Jericó, ese era el lugar en el que una mujer había puesto su fe en el Dios verdadero.

          La ciudad entera había escuchado sobre estos israelitas que estaban llegando a Canaán, la tierra prometida a ellos por su Dios ¿sería ese Dios tan poderoso como habían oído decir? La mayoría de las personas en Jericó no lo creían, pero Rahab sí. Rahab había creído en el Dios verdadero antes de que los espías llegaran a su casa…y por eso Dios los llevó allí.

Josué 2:8-11

Antes que ellos se durmiesen,  ella subió al terrado,  y les dijo: Sé que Jehová os ha dado esta tierra;  porque el temor de vosotros ha caído sobre nosotros,  y todos los moradores del país ya han desmayado por causa de vosotros. Porque hemos oído que Jehová hizo secar las aguas del Mar Rojo delante de vosotros cuando salisteis de Egipto,  y lo que habéis hecho a los dos reyes de los amorreos que estaban al otro lado del Jordán,  a Sehón y a Og,  a los cuales habéis destruido. Oyendo esto,  ha desmayado nuestro corazón;  ni ha quedado más aliento en hombre alguno por causa de vosotros,  porque Jehová vuestro Dios es Dios arriba en los cielos y abajo en la tierra.



          Hermosa la fe de Rahab…

          yo sé que Jehová os ha dado esta tierra..

          yo sé que Jehová vuestro Dios es Dios arriba en los cielos y abajo en la tierra…


          Rahab era una prostituta, una mujer con pasado, con pecado, con faltas ¿le impedía eso tener fe en Dios? ¡No! ¿Le impedía eso tener fe en lo que Dios podía hacer con ella? Definitivamente no. ¿Acaso hay algún pecado en tu vida, algún acontecimiento del pasado, algo en tu historia que te impida poner tu fe en Dios? ¿Qué te retiene? ¿Qué te tiene atrapada y te impide tener la fe de Rahab, esa fe que no mide el costo de obedecer a Dios?

          Rahab ayudó a los espías a escapar por la ventana de su casa, en la parte exterior del muro de Jericó y les dio instrucciones para que escaparan (Josué 2:15-17) y los espías respondieron a su ayuda asegurándole que ni a ella ni a su familia les pasaría nada cuando entraran en Jericó. Y le pidieron que colgara un cordón de grana, un cordón rojo de esa ventana para que ellos supieran cuál era su casa (Josué 2:17-18).

          El propósito de los espías al entrar a Jericó era recabar información para el momento en el que los israelitas atacaran la ciudad…pero el propósito de Dios al enviarlos allá fue salvar a Rahab, a esta mujer que a los ojos de muchos, no merecería ser salvada.

          Déjame decirte algo: Dios te ama.

          Quizás a los ojos de otros o ante tus mismos ojos, tu vida, tu persona no tiene valor. Quizás has cometido pecados horribles. Quizás tu vida es un desastre. Quizás eres de las que destruye todo lo que tocas. Quizás luchas con tu cuerpo, tu carácter, tu amargura, tu dolor…

          …Dios te ama…así como eres, así como estás.

          Y desea hacer grandes cosas en ti y a través de ti. Lo único que hace falta es fe por tu parte, fe en que Dios puede hacer Su obra en ti, fe que no mira el costo de una vida entregada al Señor, fe que no mira sus circunstancias, sino que tiene los ojos fijos en Cristo y en Su poder.

          Si una prostituta de Canaán pudo tener un lugar en esta galería de héroes de la fe y su nombre escrito en la genealogía de Cristo, ¿qué no va a poder hacer contigo?          Nuestro Dios es experto en hacer cosas extraordinarias con mujeres normales y comunes, como Rahab, como tú y como yo…porque para Él nada es imposible.



          Contenta en Su servicio,

    Edurne


Comentarios

  1. Muchas gracias, necesitaba leer esto hoy! Dios te bendiga Edurne. Un abrazo con amor desde Chile.

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  2. hermoso Edurne!!!!

    gracias por: "Quizás a los ojos de otros o ante tus mismos ojos, tu vida, tu persona no tiene valor. Quizás has cometido pecados horribles. Quizás tu vida es un desastre. Quizás eres de las que destruye todo lo que tocas. Quizás luchas con tu cuerpo, tu carácter, tu amargura, tu dolor…" aún asi Dios me ama y mi fe debe crecer y mantenerme en pie con la esperanza que tengo en Cristo! Gracias, no sabes como me hacía falta leer o escuchar algo así hoy :) un abrazote!!!

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    1. Un abrazo Karla querida!!! Estoy orando por ti =)

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