Fe muerta - Santiago (5)
Antes de comenzar…
-
Puedes
descargar estas hojas con los versículos de hoy, las preguntas de reflexión y
espacio para tus notas.
-
Ora para
que el Espíritu Santo hable verdad y sabiduría a tu corazón a través de los
versículos que vamos a estar estudiando
-
Lee
Santiago 2:14-26 varias veces. Anota aquellas palabras, ideas o versículos que
más llamen tu atención y escoge al menos un versículo para memorizar durante la
semana.
-
Repasa
los estudios anteriores y asegúrate de que has comprendido e interiorizado
todos los versículos antes de seguir adelante.
__________________________________
14
Hermanos míos, ¿de qué aprovechará si alguno dice que tiene fe, y no tiene
obras? ¿Podrá la fe salvarle? 15 Y si un hermano o una hermana están desnudos,
y tienen necesidad del mantenimiento de cada día, 16 y alguno de vosotros les
dice: Id en paz, calentaos y saciaos, pero no les dais las cosas que son
necesarias para el cuerpo, ¿de qué aprovecha?
17 Así
también la fe, si no tiene obras, es muerta en sí misma. 18 Pero alguno dirá:
Tú tienes fe, y yo tengo obras. Muéstrame tu fe sin tus obras, y yo te mostraré
mi fe por mis obras. 19 Tú crees que Dios es uno; bien haces. También los demonios
creen, y tiemblan.
20 ¿Mas
quieres saber, hombre vano, que la fe sin obras es muerta? 21 ¿No fue
justificado por las obras Abraham nuestro padre, cuando ofreció a su hijo Isaac
sobre el altar? 22 ¿No ves que la fe actuó juntamente con sus obras, y que la
fe se perfeccionó por las obras?
23 Y se
cumplió la Escritura que dice: Abraham creyó a Dios, y le fue contado por
justicia, y fue llamado amigo de Dios. 24 Vosotros veis, pues, que el hombre es
justificado por las obras, y no solamente por la fe. 25 Asimismo también Rahab
la ramera, ¿no fue justificada por obras, cuando recibió a los mensajeros y los
envió por otro camino? 26 Porque como el cuerpo sin espíritu está muerto, así
también la fe sin obras está muerta.
¿Fe? ¿Obras? ¿O fe y obras?
¿Qué
es una fe falsa? Una fe falsa es aquella que no da fruto, aquella que no
evoluciona, que no cambia, que no se desarrolla. Aquella que se guarda para sí
misma el regalo de la salvación y lo entierra en la tierra sin sacarle ningún
rédito.
La
fe es la doctrina clave de la vida cristiana. El pecador es salvo por fe
(Efesios 2:8-9) y el creyente debe caminar por fe (2 Corintios 5:7). Sin fe es
imposible agradar a Dios (Hebreos 11:6) y cualquier cosa que hagamos fuera de
la fe es pecado (Hebreos 11:6)-
Alguien
dijo que la fe no es creer a pesar de la evidencia, sino obedecer a pesar de
las consecuencias. Cuando leemos Hebreos 11 nos encontramos con hombres y
mujeres que actuaron a partir de la Palabra de Dios. La fe no es algo abstracto
y nebuloso. Es la confianza en que la Palabra de Dios es verdad y que obrar en
todo momento de acuerdo a esa convicción traerá bendición a nuestra vida.
En
este fragmento, Santiago habla sobre la relación entre la fe y las obras.
¿Somos salvos solo por la fe? ¿Somos salvos por la fe y las obras? ¿Sólo por
las obras? A veces nos confundimos con este tema.
Como
he dicho antes, el pecador se salva por fe. Nada más. Solo por fe.
Efesios 2:8-9
Porque por gracia sois salvos por medio de
la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; 9 no por obras, para que
nadie se gloríe.
Las
obras deben venir como consecuencia de esa fe.
Efesios 2:10
10 Porque
somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios
preparó de antemano para que anduviésemos en ellas.
Una
vez que somos salvas, nuestra vida cristiana debe componerse de una obra tras
otra. Dios ha preparado esas obras para nosotras ¡están ahí! Tan solo debemos
caminar en ellas, remangarnos y ponernos manos a la obra.
Fe muerta
Incluso
en la iglesia primitiva había personas que decían ser salvas pero que no lo
eran. Jesús decía: “No todo el que me
dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la
voluntad de mi Padre que está en los cielos.” (Mateo 7:21)
Las
personas con fe muerta conocen el vocabulario cristiano para orar o para dar
testimonio. Incluso pueden citar versículos, pero su forma de vivir no está a
la altura de sus palabras. Piensan que lo que dicen es suficiente, pero no es
así. Las obras son la verdadera marca del creyente.
Santiago
da la ilustración del pobre que llega sin ropa y con hambre. La persona con fe
muerta se da cuenta y le dice “Id en paz,
calentaos y saciaos” pero no hace nada por suplir su necesidad, aun
pudiendo hacerlo.
Como
creyentes, tenemos la obligación de ayudar a suplir la necesidad de otros, sea
la que sea –
Gálatas 6:10
“Así que, según
tengamos oportunidad, hagamos bien a todos, y mayormente a los de la familia de
la fe.”
Ayudar a una persona que tiene una necesidad es una expresión de amor. Y la fe obra por amor (Gálatas 5:6). A lo mismo se refiere el apóstol Juan en 1 Juan 3:17-18 o la parábola del buen samaritano (Lucas 10:25-37).
Cualquier
declaración de fe que no resulta en una vida cambiada y en buenas obras es una
fe falsa. Esa persona tiene una experiencia intelectual de la fe, conoce la
doctrina, pero nunca se ha sometido a Dios.
Fe Viva
La
fe viva es una fe real, una fe que tiene como resultado una vida cambiada. Es
una fe que está basada en la Palabra de Dios.
Santiago
utiliza la ilustración de Abraham y Rahab para ejemplificar la fe viva, una fe
que tiene, como objeto, la persona de Cristo. La fe viva siempre está basada en
la obra de Jesús en favor nuestro.
La
fe verdadera afecta a la mente, al corazón y a la voluntad. Estas personas en
Hebreos 11 eran hombres y mujeres de acción: Dios habló y ellos obedecieron. La
fe verdadera siempre guía a la acción, al cambio, a la regeneración del
creyente, a las obras, al servicio.
Tito 3:8
“Palabra
fiel es esta, y en estas cosas quiero que insistas con firmeza, para que los
que creen en Dios procuren ocuparse en buenas obras. Estas cosas son buenas y
útiles a los hombres.”
Según
Warren Wiersbe, Santiago 2 enfatiza que el cristiano maduro practica la verdad.
No se queda solo en las palabras y en las doctrinas, sino que lleva lo que
conoce de Dios y Su Palabra a la práctica. Su fe es la fe dinámica de Abraham y
Rahab, una fe que cambia la vida y hace obras para Dios.
Es
importante que cada creyente examine su propio corazón y su vida y se asegure
de que su fe sea viva:
2 Corintios 13:5a
“Examinaos
a vosotros mismos si estáis en la fe; probaos a vosotros mismos.”
__________________________________
Preguntas de Reflexión:
1.
¿Qué relación hay entre la fe y las obras?
2.
¿Cómo definirías tu fe? ¿Cómo están tus obras?
3.
¿De qué manera puedes reconocer a las personas con una fe muerta?
4.
¿Qué ilustración da Santiago para describir a una persona con fe muerta?
5.
¿Cuál es el mayor peligro de una fe muerta?
6.
¿En qué está basada la fe viva?
7.
¿Qué dos personajes bíblicos utiliza Santiago para ilustrar esta fe viva? ¿Qué
características de estos personajes puedes aplicar a tu propia vida?
8.
¿Cuáles crees que son las características de una persona con fe viva?
__________________________________
Al terminar el estudio:
-
Revisa tus notas sobre lo que has aprendido en el estudio de hoy. ¿De qué
manera puedes aplicarlas a tu vida?
- Hemos
aprendido que la fe sin obras es muerta. Analiza de qué manera estás sirviendo
al Señor. ¿Hay algo más que puedes hacer? ¿Estás orando para que el Señor te
abra más puertas para el servicio? ¿Estás aprovechando bien tus días? Ten un
tiempo de oración sobre esto y deja que Dios te muestre el camino a seguir.
Contenta en Su servicio,
Edurne
La
próxima semana - La
lengua – Santiago 3:1-12
Anteriormente en la serie
-
Comentarios
Publicar un comentario