Abriendo la comunicación dentro del matrimonio
En estos días me escuché
decirle a mi esposo en varias ocasiones una de las frases cáusticas de mi madre
de toda la vida....
"Ni me entiendes, ni me quieres entender"
Y es que hay veces en las que
parece que hablamos idiomas distintos... ¿no te pasa? En los que tu esposo no
entiendes lo que haces, ni lo que dices, ni lo que piensas, y, al revés,
días en los que no tienes ni idea de por qué tu esposo hizo o dijo tal o cual
cosa o por qué reaccionó de la manera en la que lo hizo.
Si bien es verdad que a medida
que pasan los años los "idiomas" se van sincronizando y esposo y
esposa se entienden cada vez mejor, creo que debemos ser intencionales a la
hora de abrir los espacios de diálogo dentro del matrimonio.
¿Cómo podemos hacerlo? Te dejo
algunas ideas sin ningún orden específico
Habla
¡Ja! No me digas que no te
pasa que tienes una idea en la cabeza y esperas que tu esposo te lea la mente.
O que te sientes mal por alguna cosa en específico y pones tu carón para que
todos los demás se den cuenta de que algo te molestó, pero cuando te preguntan
qué te pasa salen de tu boca un "nada" o "¿no lo sabes?".
¿Soy la única?
Déjame decirte algo de lo que
estoy segura que te has dado cuenta ya, pero que necesitamos recordar a veces:
tu esposo necesita instrucciones precisas y detalladas para saber lo que te
pasa, así que dáselas. Y hay veces en las que sabe lo que te pasa, pero no dice
nada porque teme estar equivocado y que si habla... ¡sea peor!
Así que, si hay algo que
quieras decir, algo que quieras comunicar, no te lo calles ni esperes que con
gestos, suspiros o medias palabras tu esposo automáticamente sepa lo que estás
pensando. Tómate un tiempo, piensa lo que vas a decir y cómo lo vas a decir y
busca el momento adecuado para hablar con detalle de lo que te pasa y de lo que
tu esposo puede hacer para ayudarte.
Sal
Sal de las cuatro paredes de
tu casa y cambia de escenario. Si tienes hijos, y, especialmente si son
pequeños, busca a alguien de confianza que te los pueda cuidar un rato o aprovecha
los tiempos en los que están en la escuela o en cualquier otra ocupación.
Cuando mi hijo mayor era
pequeño, había una sobrina de mi esposo que vivía en casa. Nosotros
aprovechábamos a veces para salir con el carro mientras ella se quedaba con Yennixon.
Nunca hemos tenido conversaciones mejores que esas. No hablábamos de nada en
concreto, pero hablábamos de todo. Salíamos, dábamos un par de vueltas por la
ciudad y volvíamos. Ese tiempo a solas era precioso y sé que necesito encontrar
la forma de retomar esa costumbre.
Sal de tu casa, ve a tomar un
café con tu esposo, salgan con el carro, vayan a pasear, siéntense en el
parque... cambien de escenario para mantener la comunicación abierta.
Escucha
A veces nos gusta hablar pero
no escuchar. Queremos que nos entiendan pero no nos esforzamos por entender.
Estoy segura de que tu esposo tiene miles de cosas para decirte también. Y, si
es de los que no habla mucho, hazle preguntas o busca ocasiones específicas en
las que pueda abrirte su corazón.
Busca el tiempo adecuado
Hay veces en las que buscamos
hablar en momentos que no son adecuados por tiempo, por circunstancias, por el
lugar en el que están, por las personas alrededor... A veces decimos las cosas
de manera adecuada, pero no en el momento preciso. También la comunicación se
puede cerrar cuando pretendemos hablar en momentos en los que nuestro esposo no
nos va a poder escuchar.
Muestra amor
Hay veces en las que lo
primero que debemos hacer y lo que menos hacemos es mostrar amor a nuestro
cónyuge. En esos momentos específicos en los que la comunicación es
especialmente difícil, cuando estamos buscando el lugar, el tiempo o el modo
adecuado de decir las cosas. En la espera...ama, muestra amor de todas las
formas posibles.
Ora
Obvio, ¿verdad? Pero, ¿lo
hacemos todo lo que debemos? ¿Estamos orando por nuestro matrimonio, por
nuestro esposo, por nosotras y porque la comunicación entre ambos fluya?
¿Estamos orando por encontrar los momentos adecuados, para que el Señor nos dé
las palabras precisas a la hora de hablar y para que lo que digamos, por
difícil que sea, pueda llegar de manera adecuada a nuestro esposo?
No menospreciemos el poder que
tiene la oración en todos los ámbitos de nuestra vida, especialmente, en nuestra
relación matrimonial.
¿Cómo haces tú para mantener
abierta la comunicación dentro del matrimonio? ¿Tienes alguna idea que
funcione? ¡Compártela!
Contenta en Su servicio,
Edurne
Hola es Grecia...
ResponderEliminarComo siempre, muy oportuna y acertada en tus comentarios... Dios guiandote..... para que nosotras guiadas por Dios te leamos.... pues si.. esto nos pasa a todas.... y los puntos que comentas son basicos para mejorar la comunicacion... para mi el Orar me ha ayudado inmensamente..... con lo cabeza dura que soy... Solo mi creador sabe como guiarme.... Gracias por compartir
Sí! la oración siempre hace la diferencia =)
EliminarMuy bueno!!! Tomo nota lo denlas salidas. Es verdad! Hay que retomarlo. Yo siempre intento no acostarme y pasar al dia siguiente enfadada. Me gusta irme a dormir estando los dos bien. Dios te bendiga. Saludos desde Madrid.
ResponderEliminarEse es un buen tip también Raquel Gracias! Saludos a Madrid jajajaja
EliminarMuy bueno!!! Tomo nota lo denlas salidas. Es verdad! Hay que retomarlo. Yo siempre intento no acostarme y pasar al dia siguiente enfadada. Me gusta irme a dormir estando los dos bien. Dios te bendiga. Saludos desde Madrid.
ResponderEliminarHola,Dios les bendiga
ResponderEliminarHermosa lectura!!
Me ha costado mucho aprender estas tecnicas. Muchas lagrimas, malos ratos, gritos. enojos. Para poder entender, que debemos callar en muchos momentos, buscar el momento adecuado para que nuestros esposos nos escuchen, no es facil peros si se puede. AHHH, sorprendentemente, si hablamos menos, ellos escuchan mas. jajaja
Salir, jummm! Siempre era un pleito porque yo soy la que planeo todo, el solo me sigue, yo quiero que el sea quien plane y me sorprenda. Pues saben que, me casen de frustrarme por eso. Ahora, planeo desde un café muy informal en la esquina de la casa, hasta una noche romantica con cena y estadia en un hotel, la pasamos super, el se siente amado. Y nuestra relacion ha mejorado bastante. Nunca, orabamos juntos y menos el uno por el otro. Buscando como hacer un reto encontre como orar por tu esposo por 30 dias, para intentar busque como orar por tu esposa por 30 dias. Lo imprimi, lo lelve a casa y le dije, voy hacer esto, te animas a que lo hagamos juntos. y acepto. Eso a hecho una gran diferencia en nuestro matrimonio. Orar
Besos, desde Boston, MA
Mil gracias por compartirnos tu lucha y cómo la oración ha hecho una diferencia en tu matrimonio. Bendiciones!! =)
EliminarQue hermoso, acertado, como se nota que escribes de tu diario vivir...!! se parece tanto a lo que vivimos todas, o la mayoria.... gracias por invertirte en tus lectoras, cada dia vengo con ansias al face o al correo a ver que traes de nuevo, estoy haciendo el devocional 31 dias de Renovacion y ha sido de gran bendicion para mi vida, sigue adelante, no te canses que todo lo que siembras traera fruto al ciento por uno. Un saludo y un abrazo fuerte de una maracucha que se vino pa`Barquisimeto!!!
ResponderEliminarAh qué linda Yomaris =) Gracias por tu mensaje, de verdad. Saludos desde Amazonas tierra mágica!!!
EliminarGracias Edurne! La vida nos enseña a ser prácticas me encantó el comentario de María Guerrero... pues deseamos tanto que nos adivinen el sentimiento y los pobres ni que fueran sajorinos!!😁 pero si bien hay que ser específicas un poco. Dios me sorprende, en muchas ocasiones a El le cuento los anhelos de mi corazón romántico y créeme... me han visto llorar de emoción en un café al escuchar las palabras de amor y una canción dedicada que yo sólo pensé y pedí... funciona rendirnos a los pies del amante de nuestra alma! Que Dios llene de amor sus matrimonios! Acabamos de celebrar 25 años de bodas..! Bendiciones Edurne y gracias nuevamente!
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